Por Miguel Rivas
A través de la historia resaltado a quienes se han atrevido a hacer algo diferente, quienes han tenido la gallardía de cambiar lo establecido, aquellos revolucionarios que han sabido darle un cambio brusco al futuro y la historia. Y estas son fechas para recordar a esos valientes hombres y mujeres, que al grito de ¡Viva! Se vienen a nuestras mentes los actos que construyeron el México de hoy.
¿Y que hay de quienes se atreven a sobrevivir? Que hay sobre el jaguar, las tortugas marinas, el lobo mexicano o la vaquita marina, esto sólo por nombrar algunos de las 475 especies en peligro de extinción en México. Sobrevivir bajo las condiciones de presión ambiental que existen actualmente es el verdadero acto revolucionario de hoy en día, es ir contra lo establecido y darle un giro a la historia que ya han tenido las 49 especies extintas en México.
La vaquita marina (Phocoena sinus) es quizá el mamífero marino más amenazado del planeta, endémico de México y es momento de que nosotros, cual cura Hidalgo en el grito de dolores, debamos tomar el estandarte, agitar la bandera al viento del mar de Cortés y dar el grito de ¡Viva México! ¡Viva la vaquita marina!
Agitar las aguas es más necesario que nunca para comenzar la verdadera revolución, la de defender lo que es nuestro, el derecho a un ambiente saludable y evitar la extinción de las pocas vaquitas que quedan. La revolución de conservar es ahora y seguro marcará el futuro de nuestro país.
Ser orgullosamente mexicano(a) es algo más que agitar la bandera el 16 de septiembre en un concurrido zócalo, es luchar por lo que es nuestro y por aquello que estamos al borde de perder.
¡Viva México! ¡Viva su patrimonio natural! ¡Justicia para la vaquita marina! ¡FIRMA Y APÓYANOS!