Hay bardas que parecen imposibles de trepar, rocas imposibles de mover, ideologías impenetrables, objetivos inalcanzables, pero el fracaso solo está garantizado cuando no somos capaces de iniciar una lucha… el triunfo, cuando el trabajo, la perseverancia y la unión hacen equipo.
Era el 18 de abril de 2016 cuando desde Greenpeace lanzábamos una invitación a grupo Bimbo: sembremos juntos le pedíamos, haciendo referencia a que usara su liderazgo para motivar un cambio en el modelo de agricultura del que la industria alimentaria a la que pertenece obtiene sus insumos, y fomentar una transición de la agricultura industrial a una agricultura ecológica, sin agrotóxicos y sin transgénicos.
¿Bimbo –la panificadora más grande del mundo- nos iba a escuchar? ¿Iba a hacer eco de nuestras preocupaciones sobre el uso excesivo de plaguicidas y fertilizantes en el campo? ¿le importaría motivar la producción local y sustentable de maíz en apoyo a los campesinos, las comunidades y la biodiversidad? No lo sabíamos pero decidimos intentarlo, eso sí, teníamos la certeza de que solos, como organización, sería más largo y difícil el camino, pero que apoyados por la gente, todo sería más fácil.
Desde entonces y hasta ahora -que Bimbo hizo público su compromiso de trabajar por una política global de agricultura que incluya prácticas ambiental y socialmente responsables-, mucha gente se ha sumado a esta lucha: más de 160 mil firmas, eso es más de 160 mil mentes y energías apuntando hacia lo mismo: hacer posible un cambio para tener tierra y comida sana.
Cartas enviadas a miles de ciudadanxs para convencerlos de sumarse a esta campaña, días enteros de recopilar firmas, de brindar argumentos a mujeres, a jóvenes, a trabajadores, a hombres, que su voz cuenta; cientos de minutos de personas dedicadas a firmar una petición; horas de reuniones trabajo para preparar acciones o los argumentos del diálogo con Bimbo…
Hoy podemos decir que juntxs ¡lo logramos!
Hoy podemos brincar de satisfacción ¿Puedes sentir el valor, el poder de alzar tu voz? Disfrútalo
Movimos una roca grande, muy grande, y hoy hay una piedra menos en el camino hacia una agricultura que cuide y respete los recursos naturales y a las personas.
Gracias gente por hacer posible esta campaña. Gracias Bimbo por escuchar y mostrar voluntad de cambio. Desde Greenpeace daremos seguimiento a los pasos de la empresa para garantizar el cumplimiento efectivo de este compromiso.